EL HOMBRE NO PUEDE CONOCER NI A DIOS NI AL UNIVERSO, PERO SI LOS PUEDE SENTIR. La matemática y el pensamiento lógico son caricaturas, que se aproximan a la realidad y la describen como parece que ella es; pero LO ÚNICO REAL SON LAS SENSACIONES que cada cual experimenta frente al mundo. Aunque TODOS TENEMOS EXACTAMENTE LAS MISMAS SENSACIONES (vacío, pesadez, escalofrío, expansión, contracción), CADA CUAL LAS INTERPRETA DE UN MODO DIFERENTE; incluso, un mismo individuo a un vacío en el pecho que hoy INTERPRETA como depresión, mañana lo disfruta diciendo jubilosos que hay algo inmenso (un vacío) que no le cabe en el pecho. Un entumecimiento en la cabeza que es interpretado como jaqueca, durante el sexo y en la cabeza peneal, puede ser la más electrizante y placentera de las sensaciones.
Algunas mujeres,
con la ayuda de la Sensoterapia, CUANDO SE UNIFICAN CON EL PULSO
ÁUREO (NUESTRA VESTIDURA ENERGÉTICA)
describen el parto, como un placer más intenso que el orgasmo mismo
(PARIRÁS CON PLACER). "Desnudos, sin nuestra vestidura energética",
ese placer es un dolor. Por el contrario
y paradójicamente, LA EYACULACIÓN que culturalmente hemos
interpretado como la más placentera de las experiencias, no es más
que una fuga por sobrecarga, vista desde la óptica de la Sensoterapia,
ES LA PERDIDA DE ESA VESTIDURA, LA RENUNCIA
A ESE PARAÍSO.
La eyaculación
es el reflejo de fuga que el cerebro
reptil (la serpiente del paraíso)
conecta cuando LA FRECUENCIA ELECTROMAGNÉTICA,
inducida por el movimiento de ese imán, que es el pene, EN EL EMBOBINADO
VAGINAL, ES MÁS ALTA
DE LO QUE SE PUEDE SOPORTAR; ES LA PELVIS
(subiendo
a 4x)
QUERIENDO SER (cuatro veces) MÁS QUE LA CABEZA
(x). "EL
HOMBRE QUERIENDO SER COMO DIOS". LA
ENERGÍA PÉLVICA SE HACE TAN ALTA, TAN
FRÍA y electrizante (Do6,
Do7 en la figura de los
anillos del entrecejo) que ante el peligro
de reconocerla como dolor, el organismo se ve en la necesidad de quemar
la ultima reserva de calor; conecta EL
REFLEJO DE LUCHA Y FUGA QUE LIBERA ADRENALINA, insulina, acelera el
corazón, tensiona y CALIENTA EL CUERPO PARA LUCHAR O PARA CORRER
A ESCONDERSE.